Una delegación de obispos de Estados Unidos realizará la próxima semana una visita de cinco días a Cuba en la que tendrán ocasión de reunirse con los líderes de la Iglesia católica en la isla, recorrer varias parroquias y conocer de primera mano los trabajos realizados con las donaciones de los feligreses estadounidenses tras la temporada de huracanes que asoló el año pasado el país caribeño.
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"El principal objetivo de la visita es hacer un seguimiento de la ayuda enviada a Cuba tras el paso del Gustave y el Ike", afirmó el padre Small, quien añadió que la Iglesia católica en la isla recibió casi un millón de dólares que se emplearon en 11 proyectos directamente relacionados con las tareas de recuperación de las zonas afectadas por los huracanes.
La Conferencia Episcopal de Estados Unidos dio la bienvenida hace unos meses a la decisión de la Administración de Barack Obama de suavizar algunas de las restricciones que la Casa Blanca impone a La Habana desde hace décadas, relacionadas con el envío de remesas a la isla y con los viajes de los cubano-americanos a ese país.
2 comments:
Me parece bien porque pienso que van en una función administrativa y pastoral.
Muchas veces esas donaciones terminan vendiendose (hasta en dólares) a la población.
Yo todavía conservo un cuaderno de notas que compré en la librería de mi pueblo que era donación de Francia. Lo dice.
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