En los últimos meses no he tenido tiempo de actualizar el blog con la frecuencia que quisiera. Entre complicaciones personales, cansancio, una gripe terrible y mucho trabajo, apenas he podido seguir las noticias.
Hoy trato de ponerme al día y veo que Fariñas ya tiene su pasaporte pero aún espera la carta de libertad o permiso de salida para poder asistir a la entrega del Premio Sajarov en Francia. También esperan el permiso de salida para acompañarle Laura Pollán, Berta Soler y la madre del opositor cubano, Alicia Hernández.
Tampoco le ha sido otorgado el permiso de salida a Yoani Sánchez.
Por otro lado, según la agencia de viajes Mar Azul, se espera que llegue a 330,000 el número de personas que han viajado a Cuba, o lo harán en lo que queda de 2010, en vuelo directo desde Estados Unidos. De estos, la gran mayoría son cubanos residentes en este país.
Hoy trato de ponerme al día y veo que Fariñas ya tiene su pasaporte pero aún espera la carta de libertad o permiso de salida para poder asistir a la entrega del Premio Sajarov en Francia. También esperan el permiso de salida para acompañarle Laura Pollán, Berta Soler y la madre del opositor cubano, Alicia Hernández.
Tampoco le ha sido otorgado el permiso de salida a Yoani Sánchez.
Por otro lado, según la agencia de viajes Mar Azul, se espera que llegue a 330,000 el número de personas que han viajado a Cuba, o lo harán en lo que queda de 2010, en vuelo directo desde Estados Unidos. De estos, la gran mayoría son cubanos residentes en este país.
El total puede llegar a 400,000 si se suman los viajeros que deciden hacerlo por un tercer país para ahorrar dinero o burlar ciertas reglas. El artículo no aclara cuántos viajaron el año pasado, aunque si señala que sólo 52,455 no eran de origen cubano. Recuerdo haber leído en algún lado una cifra cercana a 200,000 para el 2009. Si aproximadamente 150,000 eran de origen cubano, iimagínense la fortuna que está amasando el gobierno cubano con los trámites a los que se ven obligados los nacidos en la isla.
Sin contar el porciento que reciben por los pasajes, que pueden llegar hasta $700 el fin de año; ni los pasaportes nuevos, cuyo costo asciende a $475, la cifra podría llegar a $30 millones sólo con el trámite de renovación del pasaporte cada dos años, valorado en $200. Claro que no a todos les tocará pagar por la renovación el mismo año, pero vaya si es negocio redondo este de la separación familiar.
Sin contar el porciento que reciben por los pasajes, que pueden llegar hasta $700 el fin de año; ni los pasaportes nuevos, cuyo costo asciende a $475, la cifra podría llegar a $30 millones sólo con el trámite de renovación del pasaporte cada dos años, valorado en $200. Claro que no a todos les tocará pagar por la renovación el mismo año, pero vaya si es negocio redondo este de la separación familiar.
En esos millones no contaríamos el dinero que dejan estos viajeros en "su país" ni los trámites de los cubanos residentes en la isla que viajan al exterior, permiso de salida de por medio, para reunirse con sus familiares. Incluso los que aprovechándose de la Ley de nietos han adquirido la ciudadanía española, están obligados a tramitar un pasaporte cubano ($50), pasar por el permiso de salida y muchas veces pagar por una carta de invitación ($195) pues no queda claro si la necesitan o no cuando deciden viajar a -o a través de- un sitio diferente de aquel que los ha acogido como ciudadanos. Amén de tener que pagar $150 por cada mes (excluyendo el primero) que permanecen fuera de la isla.
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